Íbamos de las manos, agarrados. Como aquellos niños de primaria a los que se les obliga a caminar de a dos. La suya sudaba, con la humedad dulce de quien corre para ver el sol. La mía tembló…
Recursividad
Él me llama, no por el nombre sino por el cariño. Y me agarra la cara con las dos manos y me susurra “te quiero”. No se da cuenta de que tengo miedo...
Mala suerte
Debo advertirles que este es el primer texto que escribo con tanto diálogo, es uno de los 3 cuentos que entregué ayer en la Convocatoria del Taller Literario del Centro Onelio Cardoso, así que perdónenme por todas las posibles/probables faltas que pueda tener. Se los dejo con la nota al margen de que cualquier sugerencia y/u opinión será más que bienvenida 🙂
Cambio de sexo
Tú juegas a engañarme, yo juego a que te creas que te creo... Luz Casal De espaldas, sin la camisa, parece un modelo de esos que habitan las pasarelas. Pero está en mi cuarto y no lleva ropa. Un tatuaje esconde su brazo derecho y, cuando gira, en el pecho, en el lado contrario del... Leer más →
Verde que te quiero verde
¿De qué color es la esperanza?, me pregunta la niña intranquila que ocupa el cuarto de al lado. ¿Verde? respondo temerosa, mientras me viene a la cabeza aquella canción infantil que tanto pasaban por la televisión cuando yo tenía su edad. La esperanza es verde. Y después de afirmarlo, me voy creyendo la respuesta. Si... Leer más →
Sensación de náufrago
Según la Real Academia de La Lengua Española, el suicidio es la acción o conducta que perjudica o puede perjudicar muy gravemente a quien la realiza. Para mí, quedarse mirando al mar, es una especie de harakiri emocional. Esa franja azul que nos rodea tiene la capacidad inalienable de apretujarme el alma. Y van y... Leer más →
De mentirosa, nada
Dice mi abuelo que hay dos tipos de hombres: Los que dicen que se masturban y los mentirosos. Con las mujeres –y estoy revelando secretos- no pasa igual. A las mujeres se nos enseña desde que aprendemos a hablar, que los hombres –sólo los hombres- tienen “necesidades básicas” que satisfacen mediante actos prohibidos a las... Leer más →
El parque adúltero
Alguien me dijo ayer que mi parque más querido del Vedado, ese que se encuentra en 21 y H, es el "parque de los tarros". Me quedé de piedra mientras me lo decían y luego solté la carcajada del milenio. Para qué mentir, cierto es que es un parque oscuro que se presta para muchas... Leer más →
Final feliz…
Él llegó, como un adolescente, a recibir un masaje. Su primera vez, me susurró la amiga, demórate y relájale. Por encima de la ropa se le notaban sus casi 30 años. No era fuerte como esos tipos que se comen los gimnasios, pero tenía los músculos de quien sale a correr todas las mañanas. Me... Leer más →
De la ciudad y del mar, como otros tantos versos
Comienzo a leer a Montenegro (el autor de este texto) y una sonrisa se me dibuja en el rostro... un texto trampa, dirían algunos... un texto lazo, argumentarían ellas. Yo, por el amor al arte, se los regalo entero. De la ciudad y del mar En 1901, por miedo al mar, en La Habana comenzaron... Leer más →