Las olas rompían con furia en aquel malecón añejo que protegía a la ciudad de un ataque divino; la espuma bañaba las rocas de la orilla y el faro, a lo lejos, proyectaba una luz guía.
La tarde no alcanzó para soñar historias, para descubrir secretos, para concretar los besos… Sin embargo, la mar, con su manera sutil de volverse cómplice, reflejó los colores de sus ojos en el precioso atardecer que despertó a la noche.
… La tarde no alcanzó para soñar historias, para descubrir secretos, para concretar los besos… Sin embargo, la mar, con su manera sutil de volverse cómplice, reflejó los colores de sus ojos en el precioso atardecer que despertó a la noche … 😀
Es la magia de la Mar, que siempre trae cosas buenas.
casi siempre… a veces se torna tsunami y destroza.
Hay atardeceres que pueden cambiar una vida; nunca he podido resistirme al impulso (si tengo la ocasión) de perderme en esa mar que se tiñe de rojo; no lo hago por despedir al sol porque sé bien que volverá; lo hago solo por ese ultimo rayo de sol que, antes de morir, da un último grito en forma de resplandor.
Es muy hermoso lo que has escrito, niña.
Gracias Jose, a mí los atardeceres siempre me han parecido mágicos. Es casi como entre si la mar y el sol asomara un beso.
Qué bonito lo has dicho, me encanta, es precioso.
Estoy impresionado! Blog muy informativo mensaje el # nombre de mi amigo. Sólo quería comentar y decir mantener la calidad del trabajo.
Ummmmm que interesante!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! cuanta gente buena conocida. Puedo unirme???????
Eres más que bienvenido 🙂
Gracias
Me encaaaaaaaanta tu blog
aire nuevo
Te sigo.preciosa